La falta de medios para combatir el fraude fiscal provoca que cada año las arcas públicas dejen de ingresar más de 25.000 millones de euros, en una tramposa dinámica que merma los recursos del Estado y cuyos efectos se dejan notar de manera especial en ejercicios como el actual, en el que la pandemia está obligando a movilizar con un ritmo vertiginoso hasta 330.000 millones de euros: 200.000 a través del 'escudo social' y otros 130.000 en endeudamiento para mantener el funcionamiento de la Administración.
La Agencia Tributaria, que esta semana cerraba la campaña de la declaración de la renta al tiempo que abre la del Impuesto de Sociedades , batió el año pasado su récord de detección de fraude con 15.714 millones de euros, según los datos facilitados por el Ministerio de Hacienda al senador malagueño del PSOE Miguel Ángel Heredia en una respuesta parlamentaria.
Y eso significa que entre 25.000 y 45.000 millones de euros son escamoteados por los defraudadores cada ejercicio, ya que las estimaciones de los expertos sitúan la bolsa de fraude fiscal que sufre España entre los 40.000 y los 60.000 millones de euros.
La gestión de Montoro se caracterizó por otro aspecto, según los datos que constan en otra respuesta al senador, que revelan cómo entre 2011 y 2018 los recortes de personal fueron generalizados entre los inspectores y los técnicos del área de Inspección Financiera y Tributaria: los servicios territoriales (autonómicos) perdieron a 102 de sus 2.801 efectivos en ese periodo y la plantilla Dependencia de Control Tributario y Aduanero, incluida en la Delegación Central de Grandes Contribuyentes, menguaba en 29 de 522, un retroceso de 131 que no se compensaba con el aumento de 33 (de 192 a 225) de los servicios centrales.
Los datos que maneja Gestha, el sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda, referentes al conjunto de la Agencia Tributaria, señalan que el recorte afectó a toda la casa, al pasar entre 2011 y 2017 de 1.797 a 1.794 inspectores y de 6.903 a 6.761 técnicos. Al cierre de 2019, ya con María Jesús Montero en la cartera, esos dos grupos habían aumentado en 80 y en 546 miembros, plantilla que prácticamente se mantiene ahora.
Los "significativos" recortes en la plantilla de inspectores
Heredia, que califica de "auténtica barbaridad" el recorte "sustancial" del número de especialistas "dedicados a luchar contra este fraude" en la etapa de Montoro, considera que "si la reducción de inspectores de Hacienda fue significativa, lo fue aún más la cantidad recaudada".
En este sentido, llama la atención sobre cómo la recaudación media por fraude con los gobiernos de Rajoy fue de 13.354 millones de euros por año, "con mínimos como el de 2013, donde sólo se recaudaron 10.950", dato que contrapone con los resultados en este apartado de 2019, el primer año completo de Pedro Sánchez, cuyo registro de 15.714 "supone un aumento de 2.000” frente al promedio anterior.
"Llevamos años llamando la atención sobre el diferencial de personal y de recursos con los países de la UE y la OCDE, con los que estamos casi a la mitad tanto en efectivos por ciudadanos como en inversión", señala Carlos Cruzado, presidente de Gestha, que anota que "eso se refleja en los resultados. Si duplicáramos los efectivos duplicaríamos los resultados".