El coordinador de los Técnicos de Hacienda (Gestha) en Extremadura, José Antonio López de Lerma, pedirá mañana en la Asamblea de Extremadura una reforma fiscal que palíe las desigualdades económicas y el déficit de la región y modernización y más medios en la lucha contra el fraude y la evasión fiscal.
El responsable de Gestha, junto a representantes de diferentes colectivos económicos y sociales, comparecerán mañana en la Comisión de Hacienda y Presupuestos del Parlamento extremeño, dentro del período informativo del Proyecto de Ley de Medidas Tributarias, Patrimoniales, Financieras y Administrativas.
En un comunicado, Gestha reitera la necesidad de una reforma fiscal que se ajuste al artículo 31 de la Constitución, que recoge los principios de progresividad e igualdad fiscal que actualmente se están vulnerando.
Así, recuerda que las últimas medidas del Gobierno han ido en sentido opuesto, ya que la rebaja del IRPF de 2015 supuso un ahorro de 4 euros anuales para las rentas más bajas -hasta 12.450 euros- frente a los 860 euros al año de los contribuyentes que ingresan más de 60.000 euros, lo que demuestra que tuvo un alcance muy limitado, pues solo el 3,3% de los contribuyentes percibe esas rentas.
En cuanto a las cuentas extremeñas se refiere, Gestha señala que hay que tener muy presente el informe que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) presentó el pasado jueves, en el que se empeoran las previsiones de cumplimiento de déficit de Extremadura.
Según este informe, es "muy alta" la posibilidad de tener un déficit mayor del 0,8% previsto, lo que hace más necesario aún un aumento de la recaudación, mejorando al mismo tiempo la equidad del sistema.
Los técnicos señalan que resulta incongruente el mantenimiento de la bonificación del 99% en la cuota del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones para todos los descendientes, con independencia tanto del montante de la cuota como del patrimonio preexistente.
Por otro lado, Gestha considera imprescindible que se incrementen los medios en la lucha contra el fraude fiscal, que no solo tiene un coste para las arcas públicas, pues a cada contribuyente le cuesta de media 2.000 euros de más en impuestos.
Para el colectivo lo más urgente es que el próximo gobierno ponga en marcha un plan contra el fraude que sea eficaz y realista para reducir la elevada bolsa histórica de economía sumergida, que ya supone el 24,6% del PIB, más de 253.000 euros.
Para ello, es necesario que haya una mayor coordinación y colaboración entre las administraciones tributarias autonómicas y la estatal y que se cree una base de datos única accesible para los efectivos de todas estas administraciones.
Pero además, Gestha recalca que lo fundamental es que se destinen más medios a este cometido, pues actualmente la Agencia Tributaria solo tiene un empleado por cada 1.928 contribuyentes, frente a países como Francia, donde hay uno para menos de la mitad de contribuyentes (860) o los 729 de Alemania.
En concreto, los Técnicos calculan que España necesita 26.718 nuevos funcionarios para combatir el fraude con plenas garantías, ya que actualmente el 80% de los efectivos de la AEAT se dedican a se dedica a investigar a autónomos, pymes y trabajadores, lo que deja muy poco margen de actuación para luchar contra el gran fraude y controlar en mayor medida el gasto público y las subvenciones.
http://www.finanzas.com/noticias/economia/20161009/gestha-pedira-asamblea-sistema-3495477.html